Una Tarántula en mi cama

Anoche, tras regresar de dar una vuelta por León con unos nicas que conocimos, al llegar a casa y ver la cama quedé sorprendido al ver una trántula en mi almohada. No es que fuese enorme, pero tenía pelos y mediría como 8-10 cm. Me impresionó y me asusté un poco, creo que a nadie le agrada ver una tarántula en el lugar donde uno duerme.

Ayer llovió toda la noche, y suponemos que iba buscando el calor. Mi cama está junto a una ventana, y ella debió introducirse por ahí. Ya no volveré a dejar esa ventana abierta cuando me vaya o cuando duerma.

Se fueron las chelas

Ayer, a las 03:00 de la madrugada se fueron las compañeras y compañeros de la expedición cooperante: las doctoras, Cayetana, Carla y Esther; los caris biólogos, Aida y Alfredo; los biólogos de laboratorio, Oscar, Ana y Patricia; las maestras, Irene y Bea; la ambiéntologa y compañera de proyecto, Estrella del Mar, Cintia; las enfermeras, Alicia y Silivia. Días antes nos dejaron las Martas, Martita la maestra y Marta la bióloga, y mi otra compañera de proyecto Sandra, pues ellas se iban para España vía El Salvador.

Está siendo una experiencia inolvidable, muy buena gente. Creo que es uno de los mejores veranos de mi vida.

Nos quedamos acá David, Noe y yo; bastante compuljidos y desolados. El silencio fue demoledor.

Noe se va 15 días de viaje por Nicaragua. David el domingo se irá para Somoto y allí es donde él trabaja. Yo me quedo solo en León, empieza una nueva fase para mí.

Gastronomía Nica

Sus dos pilares básicos son el arroz y los frijoles. De hecho, el plato nacional es el Gallopinto, que se compone exclusivamente de arroz cocido y frijoles cocidos. Se toma para desayunar y en la cena. En la mañana se suele acompañar de huevos revueltos y en la noche de carne. Pero he de decir que hay muchísimas familias únicamente toman este plato porque sus recursos económicos no dan para más, y casi siempre sin acompoámientos cárnicos. También se puede acompañr de maduro frito, tajadas de plátano frito, queso frito, cuajada. etc.

Hay otros platos típicos en la cocina nicaragüense:


Indio Viejo: es un guiso cuya base es un sofrito de tomate, cebolla y pimiento, al que se le añade carne de res y maíz. El resultado es un plato con un caldo bastante trabado y contundente.

Nacatamales: uno de los paltos más contundentes. Es una masa de maíz molido y manteca, con carne de cerdo, arroz, papas, tomate, cebolla y pimiento. Esta masa se envuelve en hojas de plátano y se cierra con cuerda. Se cuece y se come caliente. Es un plato muy calórico, contundente. Se debe acompañar de ron o café negro.

Pollo empanizado: se deja macerando el pollo con cebolla, ajo y zumo de naranja agria . Posteriromente se reboza en pan rallado especial. Se frie en aceite bien caliente y se acompaña con arroz blanco.

Chancho con Yuca: chancho es el nombre que recibe el cerdo en estas tierras. Lo elaboran adobado y posteriormente guisado. La yuca la cuecen y lo sirven todo en una hoja de platano.

Vigoron: se trata de las cortezas de cerdo. Tambien los riven con yuca.

Quesillo: es un queso silimlar a la mozzarella, pero con forma de tortilla gruesa. Se suele servir sobre una tortilla de maiz, con cebolla encurtida y se enrolla, quedando una especie de rollo, como un burrito mexicano. Son originarias de Nagarote y La Paz Centro.

Estos son unos cuantos ejemplos de lo que da de si la cocina nicaragüense, hay más comidas, como cuajada, repochetas, frijolitos licuados, carne asada, churrasco, camarones empanizados, chuleta de pescado, langosta al ajillo, langosta en salsa de coco, etc.

San Juan del Sur y Chacocente

Tocó ir al suroeste del país, que es la zona que queda entre el pacífico y el lago Nicaragua, muy cerca de Costa Rica. El objetivo principal era ver el desove de tortugas.

El viaje, como no, tuvo su inicio en la estación de autobuses de León. Se nos hizo un poco tarde y los microbuses ya estaban llenos y había enormes colas para cogerlos, peor tuvimos suerte porque pudimos agarrar un autobus expresso que no tardó mucho en salir. Ya en Managua agarramos el taxi para la estación de autobuses Roberto Huembes. En la estación nos jalaron y nos vimos en el autobus que va a San Juan del Sur. Preguntamos que si había asientos, a lo que nos contestaron "como no". En un principio yo veía todos los asientos ocupados, y negaba los autobuseros afirmaban, pero me sorprendieron cuando colocaron unas banquetas de plástico en el pasillo en las que nos sentamos. Eso si que es aprovechar el espacio al máximo, creo qué los ejecutivos de IKEA debería visitar este país para ver cómo aprovechar el espacio al máximo. Tras unas horas, al final llegamos a nuestro destino.

San Juan del Sur es el lugar más turístico del país. Nos alojamos en un alojamiento muy cutre. En la habitación no podía haber más de 2 personas de pie. Era agoviante y muy húmeda. Dormí mal. La ropa estaba sudada y no se secó. Lo mejor el pueblo y la cena.

A la mañana siguiente nos fuimos a Chacocente, el objetivo principal del viaje. Chacocente es una reserva natural. El principal atractivo es el bosque tropical seco en el que habitan tres especies de monos y la playa, donde vana desovar miles de tortugas. El llegar fue otra odisea. Desde San Juan cogimos un bues hasta Rivas, allí contratamos un taxi hasta el astillero por 30 doláres. Moisés era nuestro taxista, un joven ilusionado de 19 años que acababa de adquirir el vehículo para ganarse la vida como taxista. El bonito paisaje y el reggaeton y la bachata amenizaron el viaje. Pudimos comprobar las inversiones realizadas por el capital privado en lujosos complejos turísticos, que contrastan con la humildad de las comunidades. Nuestro taxi nos apeó en El Astillero, comunidad desde la que tuvimos que caminar durante 2 horas, yo calculo 8-10 kilómetros hasta encontrar las instalaciones del MARENA, donde heríamos la dormida.

Una vez allí nos presentamos. Nos acogieron muy bien , aunque las condiciones no eran las mejores porque no disponían de agua ni de aseos por problemas técnicos. La bonita playa virgen merecía el contrapunto de la nula comodidad. Allí había 3 catalanes acompañados por un nica que residía temporalmente en Cataluña. Excepto la mujer mayor, el resto eran bastante gilipollas. Se formaron dos grupos: el primero operó de 18:00 a 24:00 y el segundo de 24:00 a 06:00. EL primer grupo, en el que se integraron los catalanes se llevaron la peor parte porque sufrieron en sus carnes el rigor de las lluvias tropicales y no divisaron ninguna tortuga.

A las 24:30 la lluvia cesó, tuvimos suerte. Nuestra tarea consistia en esperas en un punto de la playa a que llegasen las tortugas. Esperamos y esperamos y no ocurría nada. Unos cuantos decidieron dar un paseo, y vieron una tortuga, nos dieron unas señales con el foco y rápidamente acudimos. Fue muy emociante, como la tortuga entierra sus huevos, y luego regresa al mar, "como vino, se fue".

La noche fue agotadora. Yo me fui a maldormir a las 4:30. Acabé con toda mi ropa sudada y húmeda, era asqueroso, holía mal, me daba asco a mi mismo. Ya no tenía ropa limpia, la ropa estaba resudada, tenía ya varias capas de sudor. Deseaba llegar a casa y ducharme.

Mi cámara de fotos ha muerto. Lo descubrí el otro día en Granada. Excitado por la belleza de su arquitectura pretendía tomar unas instantáneas y al sacar la cámara de su funda me encontré con que la pantalla estaba rajada, fracturada. En un principio pensé que podría ser un efecto óptico, pero cuando la encendí quedó patente la fatalidad.

Y como las desgracías nunca vienen solas. El domingo por la noche, a la vuelta de mi periplo de fin de semana, al pulsar el botón de encendido de mi portátil descubrí que estaba estropeado.

Estoy a la espera de una vista a la tienda de Kodak para que me dispensen el certificado de defunción de mi cámara. Respecto al portátil llamé a los servicios informáticos de la UNAN León pero no he recibido respuesta.

Mis caseros viajan a Estados Unidos la última semana de agosto. Allí los aparatos tecnológicos son bastante más baratos. Ante el lamentable estado de mi cámara se han apiado de mi y se han ofrecido ha traerme una cámara. Lo prefiero ante un favor que te hace el amigo de un amigo.

Me he decantado por LUMIX. En concreto estos modelos:

DMC-FZ50 600e

DMC-FZ18 400e

DMC-FZ8 300e


Se aceptan propuestas y opiniones

Reserva Natural de Miraflor

Este fin de semana nos decidimos a ir a la Reserva Natural de Miraflor. Para ello cogimos un bus en la terminal de autobuses de León dirección Estelí. Entre el calor, las hordas de vendedores y los intentos de engaño para que te montes en cualquier bus y sueltes la plata, entras aturdido al vehículo. 60 córdobas por un pequeño trozo de asiento en el que es imposible caber. Invertimos algo más de 3 horas, y eso que es un Expresso. El viaje se ameniza con la música, el paisaje y charlando con tus compañeros de asiento. A los nicas les encanta conversar, platicar es como ellos le llaman. Me preguntan por España, cómo se vive, en qué trabaja la gente, cuál es el clima, qué se come; también hablamos sobre el país, la dura situación, la religión, algo de política. Es un bonito intercambio. Incluso puedes llegar a hacer amistades.

Cuando llegamos a Estelí prácticemente ha anochecido. Todo el mundo nos cuenta que es una ciudad peligrosa, sobre todo en la periferia y en las inmediaciones de la Panamericana. Posteriormente descubrimos que no es tan peligrosa, pero hace 5 años sí, había 300 bandas y hoy solo unas 20. Según nos contó nuestro guía la situación era muy jodida, cuenta que le pegaban le pedían dinero para pasar a su barrio, a la salida de la escuela. Se planteó entrar en una para poder sobrevivir, estuvo a punto de ingresar, pero no lo hizo. Esta reducción no ha sido a través de la represión policial, sino con la integración de las bandas en la sociedad. El plan ha sido crear equipos de fútbol y ligas. Es necesariop indicar que Estelí cuenta con uno de los mejores equipos de fútbol del país, el Real Estelí.

Nuestro objetivo es llegar al alojamiento que habíamos reservado. Hotel Miraflor. El nombre no le hace justicia. Feo, interior y poco luminoso. Doy fe de lo que recoge la Lonely Planet, "colchones de espuma". La cama es incómoda y dura, es como dormir en el suelo. El baño es sucio, el inodoro no tiene tapa y la ducha no está separada por ninguna cortina, es necesario usar chanclas si uno no desea volver con hongos en los pies. La verdad que auque no tiene tele uno no se aburre. Las polillas amenizan la estancia. Enormes polillas, una de ellas era mayor que un murciélago, cuando la vi empecé a creer en la leyenda del chupacabras. Mis compañeras se atemorizan ante semejante animal. La dueña del hotel, al oír los gritos de pánico entra, escoba en mano, en la habitación. Con más ganas que habilidad intenta aniquilar a la alimaña. Se posa en el fluorescente y la señora le da un escobazo, que tiene comop resultado la muerte de la polilla y la del fluorescente que iluminaba nuestra habitación. Nos quedamos sin luz. La dueña del hotel, para paliar el daño nos ofrece una lámpara publicitaria de cerveza giratoria. La enchufamos y aquello se pone a lucir y girar. La situación es surrealista y muy cómica.

Tras acomodarnos, quedamos con Maqui, una señora fantástica, presidenta de la ONG No te quedes al margen. Ella trabaja en la UAM, arreglando los problemas de los investigadores foráneos que acuden a nuestra amada universidad. Es un encanto, un cielo de mujer. Nos invitan a ir al día siguiente a la inauguración de un pozo y un depósito que han llevado a cabo en la comunidad de La Sirena. Decimos que sí. Tras este encuentro nos recomiendadn ir a cenar a un restaurante cubano. Cenamos de escándalo, yo tomo una mialnesa de pollo, no les quedaba carne de res. Una de las mejores comidas que he catado en tierras nicas. La pena es que estaban hasta arriba de trabajo y no pude tomer un daiquiri.

Al día siguiente nos despertamos. Hemos quedado con ella y sus chicas en el Hotel Los Arcos, que surge como una iniciativa de una ONG para recuperar a chavalos con serios problemas. Viajamos en el vehículo de Mairo a la La ONG aporta financiación y asesoramiento técnico y la comunidad aporta la fuerza de trabajo. Allí acuden vecinos, lideres de la comunidad y concejales. Todos están contentos y felices. Ha sido una bonita experiencia.

Habíamos quedado con Leopoldo, Polito para sus amigos, auqnue el prefiere que le llamen Leo, en la terminal Norte de autobuses de Estelí. Cogeríamos el bus de las 12:00. Los agarramos de casualidad, el ya esta dentro. Tardamos una hora en llegar a la Reserva.

La Reserva de Miraflor tiene 3 zonas en función de la altitud: baja, media y alta. La zona baja es similar a una dehesa extremeña en primavera. Me recuerda a mis estnacias en Extremadura en Semana Santa. La zona media es más boscosa y húmeda, aunque también hay ganadería cada vez hay más bosques. Y la zona alta es muy húemda y boscosa. Es nebliselva. Hay muchísima vegetación, las epífitas pueblan la totalidad de los troncos de los árboles (roble encino, matapalo, etc.). Es muy frondoso. También hay cultivos, plátanos y cafetales. La tarde la dedicamos a buscar alojamiento y visitar un cafetal. Tras vistar varios lugares para dormir nos decantamos por la Casa de Comanejo porque es gratis por ser cooperantes que trabajan en la UNAN, a pesar de ello decidimos dar 2.5 $ por persona como colaboración con la Reserva y la Comunidad. He de decir que el alojamiento que más nos gustó fue Finca Neblina del Bosque, 25$ por persona al día con las tres comidad. También visitamos un cafetal ogránico, lo que nos hizo mucha ilusión porque no conocíamos esta planta. És un cultivo totalmente sostenible, se cultiva bajo la sombra de plataneras y árboles del bosque. La producción es mínima y conlleva numerosos cuidados a lo largo del año y una esmerada recolección. El resultado es un café extraordinario.

Por la noche cenamos en Finca Neblina del Bosque. El lugar lo regenta una pareja nica-alemana. Desde hace tres semanas son madre y padre, el niño es una cosita chiquita. Justo al llegar al lugar empieza a caer una lluvia impresionante, tuvimos suerte. En la cena conocemos a un simpático diplomático sueco. Con el conversamos sobre el país. Fue una velada muy agradable. Nos invita a volver con él hasta Managua el domingo en su vehículo del cuerpo diplomático.

Al terminar de cenar llegan al lugar 6 compañeros. Con ellos habíamos quedado allí, debían coger el bus de las 4 en Estelí. Supusimos que lo habían perdido al acudir la gente del bus y no aparecer ellos, pues yo no tenía batería en mi celular y Leo no disponía de saldo, y solo había cobertura en dos puntos en 7 kilómetrso de camino. De repente aparacen, en medio de la tromenta, como una aparición. Cenan y nos vamos a dormir. Tardamos 30 minutos en llegar. No hay luz, tenemos que ir con linternas y el camino está embarrado y encharcado.

Nos disponemos a dormir. Los chicos que tarbajan en la casa de Comanejo lo habían prepado todo. Hace frío, peor el cansancio hace mella y caigo rendido. Previamente, Leo saca un puro y nos lo fumamos entre los dos. Es suave, está muy rico. Leo, nuestro guía, es un joven cafetalero de la comunidad. Vive en Estelí y se gan ala vida como puede, bien como gúia turístico, o como vendedor de puros. Es una persona con cierta cultura y con la que puedes conversar de cualquier cosa. El año pasado estuvo en España, en Madrid concretamente, mediante un acuerdo de cooperación para recibir formación. Es un gran entendido en café y puros, estuvo trabajando 2 años en una fábrica de habanos de Estelí. Tienen 24 años, tiene una niña de 2 años y está separado.

Al día siguiente nos dipsonemos a hacer un recorrido por el bosque. Nuestra intención es ver el quetzal, pero no lo logramos porque hace falta mucho timpo para internarse en la espesura. De todas maneras, paseamos por la nebliselvam disfrutando de las órquídeas, auqnue solo vimos 2 en flor, las bromelias, los grandes árboles, sobre todo el matapalo, una especie parásita que crece sobre otros árboles, asesinándolos. Llega a tener unas dimensiones muy notablesm, hasta 70 metros. Es precioso, aunque algo incómodo para andar por el barro.

A las 12:00 terminamos. Descansamos en la finca de las cabañas, nos sentamos viendo el bonito paisaje y los coilibrís que allí se acercan a un bebedor especial para ellos. Es un placer. Tras comer, viajamos en coche a Managua con el diplomático sueco, una persona muy amable e interesante.